Lo cierto, es que no tenía pensado publicar esta semana. Tengo muchos frentes abiertos sobre diversos materiales, pero, o bien por falta de horas de vuelo o por falta de material gráfico, me faltan cosas para ir cerrando temas y haciendo publicaciones sobre ellos. No obstante, ha habido un par de acontecimientos estos días que encajan con el título de esta entrada, por lo que, finalmente, me he animado a hacer una publicación «breve» al respecto.
Desde la última publicación, no había vuelto de pesca hasta el pasado fin de semana… razón principal de que probar material se alargue tanto en el tiempo. Invierno duro este… y con las aguas trucheras cerradas y los pantanos desbordados, mi única opción es la costa… que entre, lluvia, viento y temporales, tampoco se deja «domar» demasiado.
El pasado fin de semana, no obstante, pude salir un par de veces. Unos días antes, recibí una de las nuevas varas de YKR, incluídas entre las novedades de la marca para este año, la YKR Alma (Blue Edition), que este año, pasará a formar parte de mis cañas de gama media para spinning MH, y de la que os hablaré pasado el pertinente tiempo de horas de uso. Al menos en Galicia, han causado bastante expectación en redes sociales y bastantes comentarios positivos, motivo este, que tuvo cierta influencia en que me animase a probarla.
Lo cierto es que su estreno no podía haber ido mejor y cómo «no hay 2 sin 3«, el tercer róbalo del año tuvo a bien alegrarme el día, siendo, además, con 5,3 Kg de peso, mi récord actual a spinning. Picada lejana al segundo lance con, cómo viene siendo habitual últimamente, un stickbait… en este caso de 130mm y 41g. Picada muy violenta… algo que se viene repitiendo con este tipo de señuelos. La tónica de los últimos 2 meses, es que los peces comen muy lento… y, estos señuelos, se adaptan a la perfección a este tipo de pesca. Las embocadas son, practicaménte, en parado, incluso en caída… y, normalmente, la muestra viene por completo dentro de la boca del pez. En este caso, sobresalía por uno de los opérculos a través de las branquias.
La batalla no fue, por tanto, todo lo épica que nos imaginamos con un pez de este tamaño. Después de las dos primeras arrancadas, violentas, en las que sí puso a prueba el equipo, perdió fuerza rápidamente, llegando a despistarme y a dudar del tamaño del pez o, incluso, de si estaba robado.
No fué hasta que lo tuve a unos metros, cuando me dí cuenta del tamaño real… podría deciros que la lucha fué encarnizada, que me obligó a dar lo mejor de mí y que me dejó el brazo temblando… pero no fué así. La realidad, es que me han dado peleas bastante más duras peces con un par de kg menos, por lo que, finalmente, conseguí meterlo en un canal sin demasiados contratiempos y, de ahí, a una poza, en la cúal, la libré del señuelo, no sin antes provocarle, irremediablemente, una avería importante.
Casi al mismo tiempo, me llegaban al móvil noticias de Pablo Touris, con el que, pocas horas antes, comentaba por teléfono la mala pinta que tenía el día. Tremendo róbalo de 6,800, desde costa, con el incombustible Tide Minnow 175, en un pedrero muy complicado y después de más de 15min de lucha saltando de piedra en piedra y «evitando» los golpes de mar (mojadura incluída). Un vídeo que es toda una clase magistral de pesca y que, espero que podáis ver pronto a través de redes sociales… porque vale la pena ser visto. Dos peces récord el mismo día de dos personas que pocas horas antes hablaban de que las condiciones eran horribles y «habría que ir por ir«… lo cual no hace más que poner de manifiesto lo siguiente: Ni él ni yo tenemos ni idea de que va esto…
El día siguiente, con mejores predicciones en cuanto a condiciones, decidí coger el coche y moverme a un pedrero abierto a 40min de casa… bolo apoteósico… ni rastro de vida en un spot que, a priori, pintaba muy muy bien. O no estaban o no supe hacerlo mejor… el resumen, finalmente, es de una picada en dos días y unas ocho horas de pesca… esto está difícil….
En otro orden de cosas, estos días se ha anunciado el estreno y la promo del último proyecto en el que he participado para el canal de Caza y Pesca de Movistar+, cuyo primer pase se emitirá el próximo 16 de Febrero a las 16h… aunque habrá varios pases más a lo largo de los siguientes días.
En este documental, podréis acompañarme a lo largo de toda una jornada, pescando a mosca y buscando las grandes truchas del Órbigo en pleno verano, momento en el que es más complicado dar con ellas… y, de nuevo, cómo «no hay 2 sin 3«, probablemente este año, salga a la luz algún nuevo proyecto interesante en el que me han propuesto participar. Cómo siempre, intentaremos aprender, pasarlo bien y enseñar peces, que es de lo que se trata para que todos aquellos que lo veáis lo disfrutéis. Espero que lo encontréis interesante.
