Con esta frase podría definirse mi último mes y medio. Tenía previsto publicar antes de disfrutar de las vacaciones de verano, pero, entre asistir a competiciones, rodajes de pesca, mi trabajo y los preparativos previos al viaje, me he visto sin tiempo, desbordado por completo. Por otra parte, después de dos años metiendole muchas horas a la ría, estas han sido las vacaciones, que recuerde, a las que menos horas le he dedicado al spinning… Unicamente 3-4 salidas en dos semanas. He estado pescando mucho, sí, pero, me he centrado en otras modalidades a las que, habitualmente, dedico muchísimo menos tiempo. Eging y slow jigging.
Muy buenos resultados en lo que al eging se refiere y mucha nostalgia de tiempos pasados. Hacía años que no pescaba tantos calamares y sepias en un período tan corto de tiempo. Este año han arrimado… y, desde que recuerdo, es esta una modalidad que me ha cautivado. Tremendamente misteriosos estos bichos… con patrones de comportamiento muy variables y con gran cantidad de condicionantes que marcan muchísimo los resultados, tales cómo la fase lunar, la corriente, el punto de marea, el tamaño del egi o su librea… por no hablar de la técnica en si y la influencia de su movimiento y equilibrio. Factores que propícian diferencias abismales entre dos pescadores que se sitúan, apenas, a 5m de distancia y, solo en apariencia, hacen exactamente lo mismo.
Lo que resulta evidente, es que si dedicas la noche al eging, dificilmente podrás madrugar para buscar lubinas a spinning… al menos sin utilizar algún «estimulante» que te permita aguantar el tipo… y no es este el caso. He tenido que priorizar… y, dado que las lubinas ni están ni se las espera, he dedicado tiempo a lo que me pedía el cuerpo, desconectar del todo y enfrentarme a algo completamente diferente y que casi tenía olvidado… pese a que, durante años, esta modalidad, se llevó una parte importante de mi tiempo de pesca.
De forma previa a las vacaciones, Julio siempre es, tradicionalmente, un mes de agua dulce… especialmente si, cómo este año, no disfruto de vacaciones hasta Agosto, de hecho, suele ser el mes del Órbigo. Mes en el que se llevan a cabo muchos de los selectivos de los diferentes clubs que dan paso al campeonato provincial… y este año he asistido a dos, al primero cómo invitado, al segundo, el de mi propio club.
La competición, desde un punto de vista meramente deportivo, no me interesa demasiado. Ir, o no ir, a un provincial, un autonómico o un nacional, en este momento de mi vida, no me quita el sueño. No tengo ningún tipo de ambición por ello, aunque entiendo, respeto y admiro a todos aquellos, amigos muchos, que si la tienen. El mundo de la pesca de competición requiere de muchos sacrificios, personales y económicos, para los que no estoy preparado… o, simplemente, he decidido que no me compensan. Es un mundo tremendamente duro y difícil que, muchas veces, no recompensa el esfuerzo dedicado a ello… especialmente si compites en la provincia de León, quizás, la de más, o una de las de más nivel, en cuanto a pescadores, de toda España y, quizás, del mundo.
Simplemente, viendo el listado de competidores, tomas consciencia de donde te encuentras. Pescadores que llevan muchos años a un alto nivel y son campeones de provinciales, autonómicos, nacionales… incluso mundiales… y esto es, quizás, la motivación que yo encuentro, en estos momentos, en la competición. Poder pescar, en muy poco tiempo, junto a muchos deportistas de alto nivel. Asistir al selectivo de alguno de los clubs de León, es cómo pegarse un atracón en un buffet libre de información. Un curso intensivo de pesca a coste cero. Simplemente, viendo pescar y prestando atención, puedes evolucionar, cómo pescador, más en dos días que en toda una temporada pescando solo.
También en el mes de Julio, y también en el Órbigo, he estado rodando para Caza y Pesca TV un documental de pesca a mosca, tratando de buscar buenos peces a mosca seca. El rodaje fué bastante bien, pese a que, los grandes ejemplares, no están, a estas alturas de la temporada, en absoluto fáciles. Perdí la cuenta de los peces que conseguimos rodar, con más de 70 capturas por cada uno de los dos días que duró el rodaje, pero tuve que ratear cada escondrijo y sudar la gota gorda para conseguir dar con media docena de peces de porte. En breve tendréis el resultado a vuestra disposición. En lo que a mi respecta, he podido ver un avance y estoy muy satisfecho con el resultado final.
Fuera de lo que es la pesca a mosca, en agua dulce, he estado dedicando, por vez primera, bastantes horas al Black Bass. Tengo cientos de fotos pendientes de edición y cosas por escribir al respecto, incluyendo varios montajes que he estado y estoy utilizando en agua dulce y salada desde hace tiempo… pero, no he encontrado el momento para hacerlo. Espero ponerme con ello en breve y poder hacer algunas entradas al respecto.
En cuanto al agua salada, apenas un par de salidas este mes de Julio. Tiempo de verano, de lubinetas, de paseantes de superficie y de pesca ligera. Cómo las truchas, las grandes están complicadas… aunque siempre se puede encontrar algún pez bonito si se sabe donde buscarlo. Este año, la ría está, literalmente, saturada de pez pasto. Sardina, jurel, caballa, boquerón… hay tanto alimento y tan compacto, que, en ocasiones, la sonda llega a confundir las bolas de pescado con roca sólida, dando lecturas erroneas de 10 o 12m de fondo cuando, en realidad, te encuentras practicando slow jigging en un fondo real de 25 o 30m.
Imposible… que un depredador ataque un jig de metal, en el medio de tal masa de seres vivos es una tarea arduo complicada, por varios motivos. En primer lugar, porque el propio pez pasto ataca el jig… muchas veces en la misma caída, sin dejarlo llegar al fondo, por lo que te ves capturando un jurel tras otro sin tener opción de otra cosa. En segunda instancia, por una mera cuestión de probabilidad… cuantas más presas vivas haya disponibles, más difícil será que el depredador se fije en el señuelo. Por último, porque, lo más normal, será que, cuando llegues al spot, todos los depredadores del lugar ya se encuentren hartos de comer y con la barriga a reventar…
Así las cosas, a lo largo de las vacaciones, 4 salidas, mixtas, mezclando spinning con slow jigging y jigging ligero… con pobres resultados en lo que a lubina se refiere. Una única captura, de un pez de unos 2Kg… y no mía. Jorge Fernandez fué el afortunado, en una de las dos salidas que hice con él y con Cristian Torres. Capturas, estas dos, de las redes sociales… que, cómo todo, tienen sus cosas buenas y malas. Con Cristian llevaba años hablando, pero, lo que son las cosas, jamás habíamos sido capaces de compartir un rato de pesca juntos… Jorge, sin saberlo, quizás sea una de las personas que más me inspiró a la hora de centrarme con mayor profundidad en el spinning y, concretamente, en la lubina, cuando hayá por el año 2011 descubrí su blog.
Tanto hemos hablado, tanto nos hemos leído, que, tras los 5min iniciales, el grupo está plenamente integrado. La conversación fluye y las jornadas se disfrutan enormemente. Pescar acaba perdiendo interés y la pesca en sí, se convierte en algo mucho más extenso, que consiste en capturar conocimientos, técnicas y momentos. Aprendes de los demás e intentas transmitir aquello que tu conoces… nunca vuelves de vacío.
Vacaciones estas de nuevas caras. Jornadas también con Xoan Traba y Alex Freire, que, por desgracia, destacaron por las malas condiciones que nos encontramos en ámbas. La primera por mar extremo… rozando el punto de muy peligroso, la segunda por calma desmedida… extremos de la balanza, con solo un par de días de diferencia. Tremenda inestabilidad de condiciones meteorológicas, que hacen que, la pesca, ya de por sí dificil, se convierta en algo completamente impredecible. Lo más destacable, un sargo de gran tamaño capturado con un Shoreline Shiner Current Master 110S de Daiwa. Tan inexperado cómo potente… completamente a oscuras y, con uno de los triples clavado en la agalla, me hizo pensar en una pieza mucho mayor.
Cómo punto culminante de las vacaciones, la captura de la única lubina que he tenido entre manos en las últimas dos semanas. Un róbalo de algo más de 4 Kg… premio a la constancia y a la cabezonería. Lo avisté una mañana de domingo, recorriendo el paseo de una zona portuaría con la familia… y se me metió entre ceja y ceja. Lunes, 15:00, ya equipado, volví en el mismo punto de marea y ahí estaba… en apenas 1m de agua, en el mismo lugar, con la misma actitud pasota. Desdeñó olimpicamente cada uno de los señuelos que se me ocurrió pasearle por delante, mostrando total indiferencia hacia ellos. Vinilos, plomados y sin plomar, microjigs, paseantes hundidos y de superficie… nada despertó en él el más mínimo interés.
Martes, 01:30 de la madrugada… hago una pausa en mi jornada nocturna de eging para coger el coche y volver a intentarlo de nuevo. El puñetero pez no sale de mi cabeza… el lugar cuenta con la iluminación de una farola, por lo que en la zona se concentra pez pasto. Parece el momento ideal para que se alimente, pero no es el caso. Creo verle un par de veces, pero barro toda la superficie con diversos vinilos sin obtener ningún tipo de resultado.
Martes, 08:00 de la mañana. Apenas llevo 4 horas en cama pero no puedo dormir. No dejo de darle vueltas en mi cabeza a diferentes opciones. Decido levantarme e ir a intentarlo de nuevo… total, está claro que no voy a ser capaz de pegar ojo. No lo veo, hay otras lubinas en la zona, pero no la que yo estoy buscando. Coloco un spotter de 5″ en la grapa y hago un par de lances. En el tercero, sale de debajo de uno de los pantalanes flotantes y, por primera vez, muestra algún interés en mi señuelo, siguiendolo durante un par de metros antes de darse la vuelta.
Le dejo descansar antes de intentarlo de nuevo. Cambio el color de spotter… no suele ser buena idea lanzar exactamente el mismo señuelo a un pez que lo ha rechazado con anterioridad. Esta vez, me decido por intentar algo diferente. Espero a que se aleje y lanzo el vinilo a una de sus zonas de paso, dejo que se hunda lentamente hasta llegar al fondo y espero. El pez da un par de vueltas antes de aproximarse al punto en el que descansa el vinilo… espero. 3m, 2m, 1m… dos jerks rápidos y consecutivos y el vinilo se despega bruscamente del fondo serpenteante… ni se lo piensa. Ataque fulminante de medio metro y empieza la fiesta.
Llevo el mismo 0,20 de fluorocarbono que utilizo cómo bajo de eging y ni siquiera puedo pensar en apretarle…el pez se mete por debajo de los pantalanes y me roza el trenzado. Cómo puedo, salto la barandilla del paseo y bajo a la escollera. Meto la caña en el agua e intento recuperarle en horizontal para sacarlo de debajo del muelle. Por suerte, después de un largo arreón, él mismo decide salir y poco a poco le gano terreno y lo arrimo. En ropa de calle, con zapatillas deportivas nuevas… o me meto en el agua o no lo saco… a mi mujer esto no le va a hacer ni pizca de gracia… lo agarro por la agalla y grito. Aplausos en el paseo… un viandante baja a la escollera y me da la mano para ayudarme a salir, otro intenta comprármelo en el mismo momento… Spain is different.
Ya de vuelta en casa, las vacaciones se sienten efímeras y tendrán que pasar un par de semanas antes de tocar la caña de spinning de nuevo. Vuelta a la normalidad… el verano va tocando a su fin y el cuerpo y la mente me vuelven a pedir que escriba. Esta es la primera entrada después de la migración a una plataforma mayor. Espero que os guste el nuevo espacio, que irá creciendo poco a poco con contenido, y espero veros por aquí, si queréis, para seguir leyendo todas las «chorradas» que se me van ocurriendo. Disfrutad de las vacaciones, los que todavía podáis, y buena pesca.
Pues interesante entretenido relato.A ver si lo de caza y pesca sale por you tube para poder verlo.Mi amigo Jose de Pontevedra me actualiza esos enlaces para poder verlos desde mi ordenador aqui en usa.Un saludo amigo.
Muchas gracias amigo. A ver si puedes verlo… yo ya he podiddo hacerlo y tiene buena pinta jeje. Un saludo!!
Buena entrada Oscar… Como ya te dije un placer haberte conocido.. Y espero que pronto volvamos a coincidir… Un saludo amigo
Seguro que pronto volvemos a compartir otro rato. Muchas gracias por pasarte y dedicar tiempo a leerla. Cómo digo en la entrada, fuiste un impulso determinante para que empezase a meterle horas en serio al spinning, por lo que simpre te estaré agradecido.
Un abrazo!
Se ve que no has perdido el tiempo. A saber qué te deparan las próximas salidas … Tal vez una juntos a los basses, que no me olvido jejeje.
Saludos
El tiempo nunca se pierde cuando haces lo que te apetece jejej. Ya sabes que cuando quieras me tienes disponible. Ultimamente, además, les he estado dedicando bastantes horas. Barcena empieza a ser interesante para ellos… ya te contaré. Un abrazo amigo.
Hola,
una pregunta: ¿cómo se titula el reportaje, ya lo han emitido?
Un saludo,
Pablo
Hola Pablo,
Todavía no me han dicho la fecha de emisión, pero no creo que tarde demasiado. En cuanto me pasen la promo y conozca la fecha de la primera emisión, lo pondré por aquí. Un saludo!!