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Target: Carp on the Fly. Carpas a mosca

Sigo añadiendo ticks a los propósitos del 2018. Primero fue la captura de lubinas a mosca, pesca que ya practico con frecuencia, y esta vez le ha tocado a las carpas… me queda pendiente intentarlo con reos y black bass (en agua dulce)… Si todo va bien, a los primeros les haré alguna visita en breve, los bass los tengo cerca, aunque en baja densidad… tocará recorrer muchos metros de orilla para localizarlos y ponerles un streamer delante.

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En cuanto a las protagonistas de hoy, lo cierto es que las tengo al lado de casa… pero, hasta el Otoño del 2017, no me había interesado demasiado por su pesca con caña de mosca. En realidad no me había interesado demasiado por capturar a mosca nada que no fuesen truchas… pero la perspectiva cambia cuando amplias un poco tus horizontes y te das cuenta de que hay vida más allá de lo cotidiano y que hay especies muy deportivas que pueden representar todo un desafío con un equipo de estas características.

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No es nada fácil hacer picar a uno de estos bichos, al menos en esta época. En cosa de un par de semanas, con la aparición de los días de fuerte calor, entrarán de lleno en el período de freza… y ahí ya puedes olvidarte. Se dedican a perseguirse unas a otras, forman bancos muy cerca de la orilla, pero pasan absolutamente de cualquier tipo de imitación que pongas a su alcance. Llegado ese momento, solo queda esperar a finales de verano para intentarlo, con muchas más posibilidades, allá por los meses de Septiembre y Octubre.

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Cómo decía, ahora mismo ya es bastante complicado… pero era ahora o nunca. O lo intentábamos este fin de semana o ya no podríamos cuadrar una jornada hasta después de verano. Ya están más centradas en sus escarceos amorosos que en comer… pero todavía es factible localizar ejemplares más solitarios y receptivos a alimentarse. No sé cómo definirlo… pero lo ves. Al final de la tarde ya éramos capaces de identificar y diferenciar, por su actitud, con bastante éxito, a los ejemplares dispuestos a comer. Con asiduidad, nos señalábamos peces, el uno al otro susceptibles de «ser lanzados».

No obstante, una cosa es localizar al objetivo, y otra muy distinta capturarlo. En primer lugar, costó bastante encontrar el qué y el cómo (qué comen y cómo lo comen). Tuvimos rechazos a montones, peces que parecían dispuestos a tomar el engaño, en el ultimo momento lo rehusaban o no lo embocaban correctamente… dando la sensación de cierta torpeza a la hora de comer. Al más mínimo roce con el hilo el rechazo era seguro… y pescando con un 0,22 la cosa, en este sentido, se complica.

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¿Un 0,22?? Que locura. Este año he llevado a la sacadera truchas de 60 a 70cm con un 0,10… En esta jornada, tanto mi compañero cómo yo, partimos peces con un 0,22 que andarían en los 50cm. ¿Locura entonces? No, potencia. La arrancada de estos peces es brutal. En este sentido, los primeros segundos después de la clavada, son muy diferentes a los de una gran trucha. Estas últimas, por lo general, se quedan un par de segundos paradas dando cabezazos antes de la arrancada, las carpas salen despavoridas en cuanto clavas. O andas fino con el freno y con la linea o la rotura es casi segura.

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En ambos casos utilizamos equipos de 9,6″ y linea #6 WFF (flotante). Sinceramente, para carpas hasta los 3 o, incluso, 4 Kg lo veo «bien»… pero no estoy muy seguro de que pudiese parar fácilmente una carpa de 5 o 6 Kg con un equipo de estas características. Quizás, una linea 8 o, incluso una 9, sea más adecuado para pelear con grandes peces de esta especie.

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Nos lo pasamos francamente bien. Cómo pesca, es muy entretenida. En primer lugar porque se realiza casi al 100% a pez visto y se necesita de bastante precisión para colocar el engaño de la forma más suave posible a menos de 50cm de la boca de la carpa. Cuando esto sucede, se pueden dar tres situaciones diferentes. Que esta lo detecte y se mueva a cogerlo, que pase olímpicamente o que huya despavorida… peces caprichosos estos.

Me he propuesto capturarlas a spinning… creo que tiene que tener su complicación engañar a estos peces con vinilos de 2-2,5″. Habrá que esperar a que pase el verano y se muestren activas rebuscando en los fondos de lodo para recorrer las orillas e intentarlo… ya siento el subidón de una pelea con equipo UL y uno de estos peces. Os lo contaré cuando suceda.

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6 comentarios en «Target: Carp on the Fly. Carpas a mosca»

  1. Sin duda son unos peces muy pero que muy entretenidos. Yo los he empezado a pescar el año pasado en el embalse del rio Tambre. Cuando esta bajo no sabes donde buscarlas, pues la mayoria del embalse es inaccesible y es muy dificil encontrarlas, pero si cierran bastante las compuertas y se llena suben por si solas a una zona concreta y es fácil dar con ellas y pasarse una buena tarde. En mi caso las pesco con maiz dulce de la ensalada y un corcho de vino a modo de boya pequeña, pues es a lo que hacen caso casi exclusivamente. Puedes encontrarte ejemplares de 4-5 kilos o mas, y ya alguno ha roto el monofilamento de 0,45 de algun compañero (mas bien por no usar el freno que por otra cosa). Este año si suben otra vez las volvere a tentar, pero con un equipo UL, puede ser muy interesante… en otras zonas de españa se estilan mucho vinilos que simulan pequeños caracoles, lombrices etc, aunque al ser herbivoras en su mayoria es complicada su pesca con algun tipo de señuelo animal. Mucha suerte, ya nos contaras que tal 😉

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    • Hola Jota,
      Son peces que se guían mucho por el olfato, por lo que es normal que el maiz dulce resulte irresistible para ellas. Por aquí me encuentro con bastante densidad, pero la verdad es que, en cuanto a tamaño, no las he visto demasiado grandes… habrá que seguir buscando. En el sur, donde los embalses son de distribución mucho más horizontal, es muy típico pescarlas con vinilo. Al bajar el agua, se generan grandes mesetas de fondo lodoso en las que los peces se alimentan y ahí es donde hay que buscarlas y presentárselo. Aquí, con embalses de distribución mucho más vertical, creo que será bastante más difícil… ya veremos. Un saludo!!

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  2. En los embalses del Miño las hay brutales.
    A veces están muy difíciles de sacar, pero tiran como locomotoras. Este año tengo que dedicar alguna salida.
    Saludos y enhorabuena.

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  3. El veneno de la pesca a mosca es poderoso. En realidad cada nueva especie amplía sensaciones y nos abre nuevas puertas a montajes, técnicas, equipo… el problema en realidad es la falta de tiempo que dedicar a ese vicio.

    Enhorabuena por esa primera carpa a mosca!

    Un saludo,
    David

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    • Que razón tienes David… mi gran problema es la falta de tiempo, tener que priorizar e intentar acertar con lo más adecuado en cada momento para no «perder jornadas».
      Gracias por pasarte. Un saludo!!

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